PARKINSON. PANDEMIA ,GUERRA Y CRISIS MUNDIAL.-



 Para los nacidos en los primeros 60, que tuvimos la suerte de ser, en muchos casos, hijos de la posguerra, ya nuestros padres nos dieron el guion de los echos, sociales, que nos iban a acompañar, sin olvidar para nada la realidad social y económica de los 60/70 la realidad actual no nos pilla de sorpresa, o al menos no de tanta sorpresas como a los jóvenes de más de 18 años actuales.- El capitalismo social que nos ha empujado en el cohete del consumismo y la propiedad inmobiliaria desaforada, estaba dentro del guion previsto.- Se trata de hacer creer a las clases , pobres y medias de que su realidad social iba cambiando con curva ascendente, de tal manera que creímos, podíamos aspirar de forma descarada a ocupar un lugar cada día mas alto, dentro de la pirámide, con una ambición sin limite, podíamos tener un buen sueldo, unas infalibles vacaciones familiares, una vez al año, en playa o montaña, el acceso de nuestros hijos a una educación publica, con acceso a los más pobres, una sanidad gratuita y de nivel, y unas pensiones más que aceptables, teniendo en cuenta las necesidades básicas de la tercera edad.- Y en ese maremágnum de ilusión social, que poco a poco se fue convirtiendo en realidad, fuimos olvidando paulatinamente ¿de donde veníamos? Veníamos de iniciar, el abandono del medio rural a los grandes núcleos poblacionales, llamados capitales donde las posibilidades laborales, casi sin formación, sustituyendo esto ultimo con interminables horas extras, ofrecían mas posibilidades ala individuo en su escalada económica y por ende social.- La calefacción no existió, ni pos supuesto el aire acondicionado, ni los “elite.moviles”, aunque por contra nos íbamos motorizando con los primeros SIMCAS, Seat-850, Seat 1500 y por supuesto los aclamados Ford.Fiesta, vehículos de escuela en los que accedimos a los tan deseados carnet de conducir.- Ya lo habían conseguido, teníamos la sensación de estar montados en un tobogán, ascendente e imparable, un “ir a mejor” que parecía no tener fin.- Pero amigo en los 70 nos dieron un pequeño aviso corrector, al que hicimos un relativo caso, “La crisis energética del petroleo” a la que sobrevivimos, con algún apriete del cinturón, y cambiando el café de después de comer, por la achicoria.- habíamos conseguido crear una inexistente clase media, , con múltiples letras, a cambio de disfrutar de vivienda en propiedad en la capital.- Eso fueron otros tres peldaños más en la pirámide social.-Pero faltaba lo mejor por venir, con una nueva boda hipotecaria con el banco, ya teníamos el “aparcamiento” en la playa de los chicos, como decían los ancianos.- Comenzamos a llevar a nuestros hijos a los colegios privados, comprando los uniformes, y pagando las nada despreciables cuotas mensuales.- ya estábamos en nuevo escalón social, haciéndonos olvidar que para mantenerlo allí, no debiera fallar el compromiso laboral, de todos los miembros activos de la familia.- Hablando de las plagas, enfermedades que de una manera u otra, te acercan con el deterioro físico correspondiente al final del ser humano.- es muy determinante como afrontas el duelo de la noticia “usted tiene parkinsón”, recuerdo que a continuación en la visita del médico de primaria no pude sin mas que en mi soledad, manifestar un llanto silencioso,……..múltiples preguntas inundaban la mente, en un mar de tristeza infinita, esperaba oír una voz lastimera de consuelo, a la que agarrarme, me sentía el ser mas desgraciado del mundo (en recuperación de un rictus cardíaco con implantación de 5 estens)……..pero como dice el dicho, todo aquello susceptible de empeorar, empeora, y tras uno síntomas sospechosos, y unas pruebas realizadas ami esposa, cinco años después de a mí,le confirman también la enfermedad de parkinsón,- y volví a llorar, y pensé egoístamente que ese diagnostico negativo no era para mí, como si el echo, hiciese desaparecer de mi cuerpo porque se trasladaba a mi esposa.- ¿que pasa por tu mente, cuando a tu supuesto cuidador le diagnostican lo mismo que a tí, sería verdad aquello de unidos para siempre en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida. )- En breves semanas íbamos a ser abuelos por primera vez, esperanzados que ese echo reforzaría enormemente nuestras respectivas reservas de dopa mina.- y el mundo a tu alrededor , te das cuenta que sigue girando, y tienes dos opciones o giras con él, aunque sea con temblor, o te bajas bruscamente, cosa que jamas pensé en este primer proceso.- El parkinsón vino de imprevisto, como elemento intrusivo en la familia, corta familia, pero personalmente puedo decir que me ha ayudado en algún refuerzo de personalidad, y en un ejercicio constante de relativización de otros factores adversos, que siempre la vida lleva consigo.- He encontrado , un aliado defensivo de gran importancia, la ironía y el humos somardas, como muro frontal contra el avance de la enfermedad, he aprendido a reírme de mi mismo, sin que ello suponga una merma de autoestima, en ningún momento.- La vida es un camino para recorres, por circuitos diferentes para cada uno, los obstáculos están garantizados, lo difícil es afrontarlos sin debilitar a los que te rodean, en los tiempos que estamos viviendo, en el que “la culpa” y la ansiedad que produce la misma, estan cada vez más extendidos.- Nos hemos empeñado en ridiculizarnos a nosotros mismos, de todo aquello que nos tuerce la felicitad, culpabilizandonos, de lo mismo, porque a la vez no sintomatizamos los problemas de los demás.- El parkinsón, viene envuelto en caras inexpresivas, problemas de hablar y por tanto incomunicarnos , con la rigidez, la falta de sonrisa, la in expresividad, no verbal, además de otros factores físicos asociados, que hacen parecernos a veces, al muñeco de un ventrílocuo, cuya mano le hace hablar, expresar sentimientos, hacer movimientos motrices, y parecer “normal” en cuanto a salud .-Necesitamos a medida que avanza la enfermedad, que esa “mano” no se desconecte de nosotros, pues es nuestro enlace ante el mundo que nos garantiza no aparezca la desconexion total.- Todo el camino lleva a un final, pero si lo sabemos desde que comenzamos a andarlo, el final será menos imprevisto, más aceptado, y asumido con mayor naturalidad.- Mientras tanto, refuguiemonos en lo positivo, y en los placeres físicos y mentales que ni la propia enfermedad pueden atacar- Han mirado alguna vez, directamente a la cara y ojos de un avanzado enfermo de Parkinson?….inmovilidad de los músculos faciales, sonrisa desaparecida, y unos ojos profundos, que parecen no mirar a nada, solo asomarte a una profundidad incalculable, sin apenas parpadeo, marcando un si estoy, pero no estoy…...que misterio tan excitante conocer las neuronas cerebrales, que articulan casi todo nuestro cuerpo, como tienen tanto poder como para transformar un cuerpo humano, en un enorme temblor descontrolado, incapaz de calmarse, dado que la mente con neuronas muertas pierde todo su poder, acercándose a una masa osea y muscular, que campa a su libre albedrío.- Qui zas para algunos esta visión de la enfermedad, sea demasiado catastrófica, al desconocer sus limites de su duración y su evolución.- otra vez aparece el miedo, ¡que no la culpa!…...pero es inevitable, aunque si , canalizable, los sentimientos los recuerdos son un lago donde refrescar dichas neuronas, o al menos asi me lo parece a mi.- 

Comentarios

  1. El gran conocimiento que tienes de tu cuerpo limitado por la enfermedad es y seguirá siendo tu mayor fuerza. Animo, Mariano, sigue regalándonos la enorme dignidad con la que sobrellevas cuanto te ha tocado apechugar. El más fuerte y cariñoso de los abrazos.

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  2. Querido hermano , siempre te he admirado por tu ánimo y valentía ,sigue así y no cambies nunca ,sabes que estoy aquí para lo que necesites ,"dentro de mis posibilidades",te quiero muchísimo ,un gran abrazo!

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